domingo, mayo 01, 2011

MI SILENCIO
























Cada noche
cuando el reloj ha dejado de latir,
escucho tu llegada, mi silencio...
Es el rumor de las sonrisas estelares
la luz centellante de la luna
el agua dormida de las olas
bajo el velo inmaterial.
Eres infinito de palabras
de letras juguetonas,
que deslizan sus caprichos
bajo tu manto incoloro.
Es deliciosa esa caricia muda
que va abriendo puertas
a otros mundos...
Dueño del sendero interminable,
de accesos desconocidos
que sólo el sueño franquea,
para permanecer allí
dulce
sumiso
inalterable en su quietud...

Y aún hoy,
tu presencia me habla
me ama
me seduce.
Dirige mis anhelos
a lo más recóndito
de tu sustancia
al alfa y el omega
de tu esencia sibilina.

M. Eugenia Miranda

jueves, febrero 24, 2011

AMOR VIRTUAL




















Sabes amor?
entre los pliegues de mi piel
tu aliento se cuela
como el viento triste
de un otoño ya vivido
como un hálito
que llega a mi boca sin tocarla.

Entonces comprendo
que siempre es mucho tiempo
para proyectos y ausencias
que la distancia hambrienta
se alimenta de sueños
y deja entre los labios
sabores de añoranza

Por eso,
cuando el viento clame
mi nombre entre tus ramas
y el rocío moje
lo que fue nuestro encuentro
contesta que no he sido
más que un virtual recuerdo.

M. Eugenia Miranda L.
En: "De amores y existencias"

domingo, febrero 13, 2011

SAUVAGE
















En el crepúsculo húmedo
he descubierto las olas
que llevan hasta tus sueños.
Dulces, cristalinas, pálidas,
como un juego de poemas
o el despertar perezoso
de las mañanas..

Manto de caricias frescas,
manos hechiceras,
labios que se entregan desnudos
al caer el velo nocturno.
Y en un río de utopías
se alza como puente
tu palabra.
Abriendo caminos prohibidos,
recodo de terciopelo
sembrado de codiciadas huellas

Mi voz, sólo espera
el rincón de tu oído
para sembrar clamores
en el silencio estrellado
Mientras tu cuerpo me cubre
de danzas interminables
en mágicos encuentros siderales.

Esta noche,
me despojé de temores,
y de llantos sumergidos
Seré sólo mujer...Simplemente mujer
en tu cóncavo abrazo.

M. Eugenia Miranda L.

sábado, febrero 12, 2011

MANOS MISTICAS
















Desde el caminar pausado de los días
veo esas manos.
Claras, traslúcidas, frágiles,
encantadas aves del alba.

Se deslizan en eterna danza
Perturban el sueño de las nubes.
Y pintando el horizonte de vientos
alcanzan el mar
en su cálido respiro.

Manos, manos mágicas…
Las conocí una vez, bajo otros soles.
Eran entonces jóvenes,
tocaban apenas sus primeros cielos.
Y hoy, plenas de tempestades y guerras
de cicatrices y heridas,
bailan al compás de cánticos celestes,
musitando palabras y silencios
a la noche.

Estuvieron en mis sueños tantas veces,
Indicaron el camino del verso,
abriendo sendas con su espada
y derrocando a la muerte ,
entregaron hálitos de vida.

Son frágiles y fuertes
jóvenes y antiguas.
Albergan luz y oscuridades
Guardan los secretos estelares,
misterios infinitos
de fines y comienzos.

Manos ,
Manos mágicas…
Manos místicas.


M. Eugenia Miranda L.

jueves, enero 13, 2011

MARITIMO

















He llegado al brillo ensordecedor
de tus ojos marítimos.
Al destello de los astros
que bañan su inmensidad plateada
en tu poderoso abrazo ,en cada uno de tus
movimientos sinuosos...

He sentido
tu andar calmo y salobre sobre mi piel.
Y penetrado los secretos de años infinitos,
creando nuevos soles, nuevos respiros,
carreteras de nubes hacia tus playas doradas,
inventando solsticios en cada una de tus ondas.
Cogiendo profundos clamores entre mis ávidas manos.

El tiempo ha quedado preso
entre tus arenas.
Ya no caminan los años ni tienen vida los segundos.
Mis recuerdos son difusas esferas que viajan aguas tibias
hasta encallar en tus salados mantos.

Mi cuerpo baila esta noche un mágico ritual sobre tus aguas.
Lluvia de pétalos , voces de sirena,
cantando al amanecer perdido, al sueño abandonado.
Al último rincón pleno de luz que permanece en tus orillas.
A la nostalgia del dormir eterno
A tu promesa de nuevos días...


M. Eugenia Miranda L.

domingo, mayo 02, 2010

PINCELADAS DE OTOÑO


Caen otra vez las hojas desde la orilla del cielo
se deslizan suavemente
pincelando ayeres

Y el viento las suspira ,
las hiere.
Envejece su color de luna,
las encierra en el baúl de las ausencias
cubriendo de rojizo óxido
sus vértebras de ensueño.

Las veo resbalar una a una
preparando humildemente
la alfombra de mis pies.
Húmedas, brillantes…
Son el libro de recuerdos
del pasado verano ,
de portadas frágiles,
con perfume a sol y sonrisa.

A veces, las levanto
y son luz entre mis manos.
huella de otras estaciones,
vigilantes eternas de momentos .
Y acaricio su piel traslúcida
frágil , olorosa a vida…


M. Eugenia Miranda Lastarria
Mayo 2 de 2010

sábado, febrero 06, 2010

EMBRUJO




Ocurre de pronto
que la noche se vuelve embrujo.
Perfumada de pastos húmedos
Tibia,
de piel suave y ojos trasparentes…

Ocurre que la brisa me trae su aliento
de pájaros ligeros,
alas suaves y cándidas.
Entonces el alma se libera,
su prisión se vuelve bruma
y sólo queda remontar el infinito
en busca de nuevos soles…

Sucede que la noche me toma
con sus manos de mil constelaciones.
Y cubre mi respiro humano con su cuerpo .
Y vuelo en sus brazos
Y solloza mi voz estremecida…
Ocurre…


M. Eugenia Miranda
Febrero 6, 2010

sábado, enero 16, 2010

NOSTALGIA


Mi nostalgia es una orilla en la tarde,
Es el color anaranjado del sol,
es la sonrisa que apenas aparece en los labios
y se pierde entre las comisuras….

Mi nostalgia tiene siglos.
Años de caminar pausado,
años de sed que ha adormecido la noche
con su manto de mil cometas…

Orilla…nostalgia
Y la recorro entera con mis manos de luz
y le pregunto por sus viajes,
por sus vuelos a planetas de sesgo azul,
por su pasar a otras vidas…
Por su presencia eterna
como roca en medio del océano..

Mi nostalgia es presente y pasado.
Ni siquiera tiene años,
permanece inconmovible al tiempo,
a los surcos de la edad,
al rescate de la memoria
a la pérdida de la cordura…

Y sigo siendo esa orilla que se quiebra
y toma senderos cálidos
en una tarde de campo
de tenue luz anaranjada…


M. Eugenia Miranda
16 de Febrero, de 2010

sábado, diciembre 26, 2009

BAHIA...
















He bautizado cada uno de tus días
con las letras de mi alma.
Iluminando tus mañanas con cántaros de rocío,
viviendo tu sabor entre mis propios aromas

He andado calles
con tu exhuberancia en las manos,
dilatando el tiempo entre arenas,
recibiendo el mar
como brebaje mágico, en el recipiente de mi piel.

Tu voz
hizo trizas la agonía que ensombrecía mis pasos.
La luz surgió como vendaval cálido.
Y se unieron tierra y agua
en un carnaval de comienzos.

Guardo entre mis labios tu acogida dulce,
fruta madura de carnes doradas
nacidas de la tierra generosa.

Bajo tu cielo ardiente no hay huella hacia el hastío
no tiene nombre la tristeza ni alas el desencanto.
Todo es movimiento cadencioso,
Cantar que cubre la brisa en su arrullo inagotable
M. Eugenia Miranda













sábado, septiembre 05, 2009

LLUEVE



Llueve…
otra vez cae la lluvia en mi poema
y los versos se estremecen de frío
en el contacto líquido y azul
de esta noche de Septiembre.

Y es el ruido de cientos de pisadas
que marchitan el suelo.
Convierten en lodazal
los pies descalzos del tiempo.
Van saltando charcos
Ríos
Mares
Océanos enteros.
Buscando orillas secas
para descansar sus sueños …
Pero es la festividad de las aguas
y el poema cae como un hilo
se descuelga complaciente
sobre mansas lagunas.
Se extiende ávido
en círculos concéntricos
y el corazón se moja
De ansiedades oscuras.

Llueve…esta noche de Septiembre


M. Eugenia Miranda L.

lunes, junio 01, 2009

REGRESO

Vuelvo a ti, mi silencio.
A tus horas calladas.
Al rumor que nadie escucha.
Al parpadeo mudo de los astros.

Intenté tomar otros senderos
y lastimaron mi piel las piedras del camino.
Destrozaron mis sueños palabras vacías
y mi sentir se vio invadido
de espejismos seductores.

Hoy vuelvo a ti.
A tus mares de vaivén inconfundible,
a tardes de crepúsculo ocre,
al concierto estelar
grabado en tus horas de movimiento leve.

Vuelvo a mis letras de navegar perpetuo,
a la búsqueda en arenas yermas
y guardo entre tus mares
las astillas que dejaron las batallas.

Sólo en ti existe el infinito.
Sólo tu mano antigua sabe guiar la mía
en el fluir de verdades eternas.
Mi territorio se encuentra dibujado
en cada esquina de tus vías celestes.

Por eso…
Abrígame
cubre de sonrisas mi acento melancólico
protégeme del dolor del vacío…


M. Eugenia Miranda L.




domingo, mayo 24, 2009


ENTONCES…ES EL TIEMPO

Entonces, es el tiempo el que no existe
ni los pasos del reloj
ni mi piel que se gasta y sucumbe
al caminar de las horas

Es el tiempo el que no vive
ni son recuerdos los que pienso.
Sólo es el ahora
que fue ayer hace un segundo
y tu respiro está aquí
como lo estuvo siempre

Nada de lo vivido es pretérito
nada es ausencia, todo existe, en el momento.
Ni la palabra de amor que regalaste
ni los sueños que has construído

Y es por eso que vives en mí
en el cálido fluir de los nocturnos
en la habitación encendida,
en la copa para dos,
en el fuego que crepita entre mis manos,
en la boca que sonríe al beso…
Y eres presente , por que el pasado no existe…

M. Eugenia Miranda









sábado, febrero 21, 2009

EN LA LUZ


Y entonces...volvió la luz
Entró a raudales derrumbando mis párpados,
mis lágrimas de agua sucia,
el eterno agonizar de las pupilas
en la ciénaga inmensa

Surgió como el rayo limpio en la tormenta
incendiando los suspiros maltrechos
de mi vivir malherido.
El llanto se agotó en la noche
y mis labios resecos
fueron paraderos de sonrisa.
Jugaron a ser mariposas ,
a ser velo de luna,
lirios convertidos en estrella,
colas de cometas cándidos...

Desde entonces las horas bailan
su compás de risa.
Mis manos tejen sueños amarillos
a la orilla de la tarde
y escribo versos de pisadas breves
para que el tiempo no pase
y el momento sea eterno.


M. Eugenia Miranda
20 de Febrero, 2009.



miércoles, marzo 19, 2008

MEDIANOCHE


Otra vez te pienso, mi silencio.
A través de la ventana
caminas mi noche de estrellas
Y la palabra yace quieta, en mi boca

Es entonces, que te invoco, te llamo
Te ansío, te palpo
En cada una de mis horas
En mis pensamientos mudos
Que navegan descalzos tu piel.

En esta hora, te aguardo
Espero tus alas blancas
Tus caricias de espuma
El albo manto que me acuna
En el mar salobre de esta noche.

Eres el agua que me cubre de centellantes luces
De sonidos escritos en la bruma
La hoja que trenza mis cabellos
El aire que silba entre mis manos
cántaros cubiertos de rocío...
y es que tú me has hecho vida
amor, ráfaga, beso húmedo, caricia de sol
has abierto mis caminos solitarios
y mi alma se llena de semillas
Desde que te sé,
No existen las distancias
Ni la ruta es interminable
Se vuelve suave el camino,
para recorrer tus pasos...

M. Eugenia Miranda L.






martes, febrero 19, 2008

PARANÁ...GUAZÚ.


Caminé tus aguas ,Paraná
me entregaste tu olor a añoranza
y mis pies húmedos de sueños
anduvieron tu recodo inescrutable.
Guardaste el gris de mis noches de insomnio
yo, el vagar de astros en tu rostro plateado
la magia del respiro dulce
fue el concierto que encendió mi territorio.


Paraná...guazú...
tu nombre me sabe a distancia
a notas que surgen desnudas
en mi bolso de caminar nocturno.
Palmo a palmo canté tu superficie
con mis letras tenues de luciérnaga
en tu infinito olor a tristeza
retuviste mi perfume amanecido...

Nos amamos esa noche, Paraná
como se aman el crepúsculo y el alba
mi piel besó tu oscuro manto
frío de estrellas, de potro adormecido.

Fue una noche de cometas
de sonidos celestes
de sueños de esplendor incomprensible...
Revolví tu cabellera húmeda
penetraste mis velados secretos
y en el fragor del beso
creamos caminos a otros mundos...

Paraná...guazú...
despunta el día en su lento suspiro
fluye el agua en tu garganta suspendida
yo recorro los pasos del retorno...
M. Eugenia Miranda L.

lunes, diciembre 10, 2007

TANGO



Mi piel...
Fue bordada por tus bandoneones
En aquella noche de profundos versos
En calles de lodo amanecido...

Tango...
Déjame labrar el ritmo distante
De tus agonías
Tu pleno vivir de pasión arrabalera
Y cada andar moribundo
Vestido en la sangre de tu voz criolla

Déjame
Cruzar tu intensa orilla
Penetrar profundo en el sollozo rasgado,
Unir mi sangre a la luz de tu alborada...

Quiero sentir otra vez tu hechicero lamento
unir a èl mi propia queja
y juntos , como una sola nota,
alcanzar la cima de tu desvarío.

M. Eugenia Miranda


miércoles, noviembre 07, 2007

HASTA PRONTO...



Habrá algún día
En que mi barca solitaria
Surque otra vez tus aguas...
Hoy...el umbral da cabida a mis pasos
Y el viento lleva lejos mi voz anochecida...

Dejé sobre tu mesa mi pincel de colores
Mis palabras de soledad empedernida
pétalos de esperanza que aún guarda mi cuerpo
mis segundos con sabor a verso
todas las canciones de mis manos,
mariposas en constante movimiento.

Dejo para ti los besos que nacen
Del caudal interminable de mis noches
Y los sueños que se acumulan en mi armario.

Quise hacer brillar estrellas en tu caminar pausado
Pintar de sol tu mirar oscurecido
Llenar de amaneceres las horas que rompió el silencio
Pero se me acabaron los sonetos
En el camino se marchitaron las rosas
Y ya no queda agua en los estanques.

El tiempo gira,
el reloj marca su paso sobre mi piel de añoranza
El rocío se ha vuelto un largo llanto
Y la noche tibia
Trae aroma a despedida.


M. Eugenia Miranda

martes, septiembre 18, 2007

ADIOSES


Guardo en mi armario como hojas de otoño,
tantas despedidas...
Voces que fueron presencia
manos de largos silencios.
Palabras azules
en aromas de otros cantos...

A veces ...
intentan derribar las puertas
y el clamor del pasado se yergue , punzante.
Entonces, los contengo, invento nuevos verbos,
sueños de mágicas orillas y los adioses callan
sus lágrimas marchitas...

Otros, simplemente escapan por la ventana.
Van deshaciendo la noche
sembrando a su paso
luces de otros continentes, en el firmamento distante.

Despedidas de suspiros dorados
manantiales de aguas mansas...
Sólo una brisa,
y la página del tiempo las borra
como alas de pájaros perdidos
en algún recodo de mi historia.


M. Eugenia Miranda L.

sábado, julio 21, 2007

MORIR ES DOBLAR LA ESQUINA





Cuando mis párpados tomen
los caminos del sueño
y otro sol alumbre las tinieblas,
no pienses que me he ido...
sólo doblé la curva
que separa lo real
de lo imposible.

Estaré en cada instante
de tus horas.
En cada silencio,
entre murmullos,
seguiré tus canciones
siendo viento en tus manos.

Hay figuras que llevan al retorno
lugares más allá del pensamiento,
instantes que existen
sin estar anunciados
o momentos que fueron
tan solo distancias.

Cuando deje la envoltura
que ya has visto
y encuentres la luz
entre mis restos,
habré vuelto a mi casa
y ya no habrá despedidas.



M. Eugenia Miranda L.

MANUAL DE PROCEDIMIENTOS



Entre todos los manuales
del día a día,
intento unir mi voz
al rol de documentos

Cuánto papel inútil
si el palpitar del alma
sólo se escribe
en sollozos o risas
en gestos de amor
y manos extendidas

Los suspiros de escritorio,
el caminar del reloj,
pasos que no encierran
sino anhelos clandestinos
recodos que no tienen nombre,
frustración de estanterías...

Entre los procedimientos
no se enseña
cómo dirigir palabras a
los árboles
ni el camino incandescente
de los sueños,
ni el vivir
de almas errantes...

Vamos haciendo nuestros
los rincones oscuros
para llorar miserias.
Y esconder
en alguna carpeta,
a los ojos insensibles,
los deseos postergados.

Y así olvidamos
que hemos sonreído
ante el color diáfano del agua
o el halo tibio de la brisa.


Envejece nuestro cuerpo
entre instrucciones.
Entre el sabor del poder
y el brillo de nuevos expedientes.
Acumulamos paredes
Y construimos cárceles
para el desencanto.

Entonces,
en mi garganta
sólo queda
el grito desgarrado
de un manual de procedimientos.



María Eugenia Miranda L.

INTERMINABLE



Eres simplemente...interminable
tu mirada cubre lo imposible
el océano eterno en la membranza
los pasos sin retorno
y en las orillas perdidas
bullentes olas de playas venideras...

Interminable....en todos tus sentires.
Los dolores planetarios, cicatrices que dejó el tiempo
sobre tu piel de guerrero.
Infinito para todas las batallas
término y principio de círculos mágicos.
Pasajero etéreo en su barco de niebla,
andador meditabundo de galaxias


El silencio es tu itinerario
luz y sombra de todos tus caminos
recodo insondable en escondidos puertos
cuna tibia de tus noches insomnes.

Interminable...
en tus manos de poeta
en versos de imágenes antiguas
en estrofas dulces de pasión inacabable.
Árbol de troncos ancestrales
pincel creador de todas las esquinas...

Cuando tu camino deje mis horas
dando vida al sueño de otros días,
seguirás siendo a la distancia
simplemente...interminable.


M. Eugenia Miranda L.






MADRE TIERRA




Hoy,
introduzco mis raíces en tu tierra
en la humedad llovida de tus ramas
en las hojas hechas firmamento...

Se esfumaron las bocinas,
el sórdido gritar de los semáforos...
Sólo la placidez de tu mojado laberinto
envuelve mis horas,
en sentires encantados, en sueños de arroyos perdidos...

Eres la voz que llama mi esencia nativa,
el deslizar imperceptible de mi savia
entre el clamor de ritmos ancestrales.

Entonces,
Sumerjo mis manos en el aroma de hierba
el coro de quienes te viven,
en cada una de tus gotas aladas...

Y así,
vuelo libre entre tus brazos
buscando en los recodos caminos secretos
aromas recónditos ,
quimeras
encendidas de tibios hálitos

Navego lento el sabor de tu alborada,
la luz que incendia tus manantiales límpidos
y mi voz se tiñe de tu sangre
en canto de utópicos colores.

En tu grito agreste encontré mi territorio,
lo que siempre he sido
más allá del tiempo... y la distancia.
M. Eugenia Miranda L.











AZUL



Dime si es el mar que en su mecer continuo
trae la tibieza de tu piel hasta mis manos
Si es su humedad salobre la que recorre tu rostro
en todos sus miradas,
en la huella que quedó
al marcar tu paso en la existencia.

Dime si es el mar que se cuela en tu alma
tocando cada fibra ,
cada lágrima,
cada sonrisa...
Y deja su sabor antiguo en tu garganta.

Azul...
en su voz infinita, en su fuerza siempre creciente
en su paso voluptuoso
que deja pisadas en tu arena.
Quien te lleva a paraísos donde no existe el tiempo
ni está escrito el retorno.

Es allí, superficie estrellada
donde los pensamientos se diluyen formando otras esquinas,
lugares de ensueño para viajeros solitarios,
seres de almas perdidas.
que no tienen paraderos ni lechos de descanso.

Azul...
en sus brazos se arrullan las tormentas
encuentran nido mis lágrimas
reposan ensoñaciones...

M. Eugenia Miranda L.






BESOS







Encontré tus besos sobre las hojas de otoño
Llegaron a mí como pájaros
Alimentando los balcones del sueño...
Filtrándose, como halos de luz
En mi ventana...

Van dejando en mis días su soledad salobre
El inquieto parpadear de las luciérnagas
Y ese ademán tibio de albas nuevas.

En ellos, bebí tu alma absorta
La herida misteriosa de tus noches
El dolor escrito en la memoria
De arenas pretéritas...


Me cautiva su poder adormecido
el susurro entre sombras,
promesa de tesoros ocultos
Y la fina piel de la añoranza...
Son fin y principio,
un momento sublime en el rastro de mis pasos
El rumor que nace en tu río huracanado
Y se diluye de pronto en otras estaciones
playas doradas y sentires de cristal.






M. Eugenia Miranda L.

viernes, diciembre 09, 2005

DE AMORES Y EXISTENCIAS.

Sobre: "DE AMORES Y EXISTENCIAS"


Es un poemario marcado por un intenso y apasionado contenido romántico. Una poesía que trabaja con el amor, ese tópico de todos los tiempos, pero que nunca deja de estar vigente, y lo hace con profundidad, por que escarba en esos lugares íntimos del ser humano, en esas zonas donde no sólo el amor se da como algo positivo, sino que también emerge la soledad, el silencio y la tristeza. La voz de la hablante adquiere una inquietante naturalidad en los momentos en que se da cuenta de esas contradicciones que se desprenden de este sentimiento, vale decir,un gesto de satisfacción al lado de una experiencia desafortunada.

Mago Editores, 2005.